El Real Madrid da primero ante el Atlético, pero decidirá el Metropolitano

Real Madrid y Atlético se jugarán su futuro en Champions League el próximo día 12 en el Metropolitano. Un duelo para el que el equipo blanco parte con ventaja tras el triunfo en el Bernabéu por 2-1. Fue una noche de emoción, de golazos en la que los de Ancelotti dieron el primer paso hacia los cuartos, pero el Atlético seguro que no ha dicho su última palabra.

El duelo del Bernabéu era un examen en toda regla para el Real Madrid. Tras la derrota ante el Betis, los de Ancelotti tenían que reaccionar sí o sí y más en su escenario favorito, la Champions League. Aunque no tenía enfrente el mejor rival posible para hacerlo. Y es que meterle meterle mano a este Atlético no parecía cosa fácil. Parecía, porque en el minuto cuatro, el Real Madrid ya ganaba Pase del recuperado Valverde para que corriera Rodrygo. El brasileño se deshizo de Javi Galán, recortó a Lenglet, por decirlo de alguna manera, y batió a Oblak con un gran disparo. Así, fue el 1-0 de un Real Madrid que encontró un filón en la banda derecha, Rodrygo superando siempre a Javi Galán. De hecho, una nueva acción entre ambos acabó con el Real Madrid pidiendo penalti a Rodrygo que el árbitro no concedió y el VAR no le corrigió.

Brahim

El partido poco a poco se fue igualando, con mucho juego en el centro del campo y en el que cada pérdida de balón era poco menos que mostrarle el camino de la contra al rival. Así, tanto Atlético como Real buscaron el gol. Y el que lo encontró fue Julián Álvarez en el minuto 32 para poner el 1-1 en el marcador. Jugada personal del internacional argentino que parecía que no tenía mucho peligro, pero soltó un tremendo derechazo que acabó entrando en la meta de Courtois. Lo dicho, un golazo.

El Real Madrid intentó reaccionar tras ese gol, pero se quedó en eso, un intento. El Atlético, al que el empare le dio más tranquilidad y seguridad, esperaba sin prisas pero sin pausas, su oportunidad para volver a marcar. Así, sin que nadie rompiera el empate, se llegó al descanso con ese 1-1 en el marcador. El segundo tiempo comenzó con el Real Madrid apretando más o, al menos, esa fue la idea porque la realidad fue que el Atlético se hizo con el balón y, por lo tanto, con el partido. Eso provocó la bronca del Bernabéu a lo que estaba pasando. Una bronca que pasó a alegría con el 2-1 de Brahim en el minuto 55. Una de sus jugadas habituales, muy de calle, en las que en un palmo se va de los rivales. Esta vez, les tocó a Giménez y Barrios sufrir las habilidades del merengue que enganchó un disparo raso para batir a Oblak y poner el 2-1 en un partido, una noche de golazos en el Bernabéu.

Al Atlético, que parecía tener controlado el duelo, le tocaba volver a remar a la contra para remontar. Y a eso se puso, con el Real Madrid esperando a las contras para aumentar el marcador. Ancelotti movió ficha y buscó tener más el balón dando entrada a Modric por un gris Camavinga. Simeone, le respondió quitando a Lino y Giulano para que entraran Gallagher y Nahuel Molina. Aunque para cambio del Cholo, el de Le Normand, un central, por Griezmann que sorprendió a más de uno.. Los movimientos tácticos de los entrenadores tampoco cambiaron excesivamente el panorama de un partido en el que podía pasar cualquier cosa.